viernes, enero 25, 2008

Estallido

Oyó una vez más su carcajada, su sello distintivo y volvió a preguntarse ¿qué era eso que lo hacía rejuvenecer, sentirse un adolescente que retorna a la secundaria en busca de amores primerizos y travesuras de recreos?
Ella reía y él estallaba. Juraría que era feliz, que millones de células se movilizaban en un único sentido y él se permitió esa sensación, pese a todo.

Debajo de la palma de la mano pueden tomarse millones de cosas y escribir miles de poemas, pero los trazos deben ser guiados por un sentimiento, una razón de ser...un destino.
En algún punto del planeta pensó en haber encontrado un camino, ella que había tenido las estrellas como techo en sus crudas noches de cinco manzanas.
Luego de tantas frustraciones y desesperanzas, quería ganar una vez, tener el horizonte clarificado, y lo podía conseguir.
Para ella él era como la apertura de una represa, una catarata de sensaciones, y no tenía tapujos en decírselo, en buscar esa complicidad, la confianza y el respeto, eje de todo su existir.
A cualquier hora, de cualquier día y lugar, se llamaban y comenzaba una historia íntima en busca de un momento de felicidad, esa que la vida le había negado a ella y le devolvió una sonrisa a él.

martes, enero 22, 2008

Escaneo

La hoja estaba en blanco, pero su mente no.
Bucaba imágenes, recuerdos, frases y cualquier cosa que lo uniera a ella, aunque más no sea por algunos segundos.
Para su sorpresa cayó en la cuenta que eran muchas las cosas que tenía de ella.
Su risa, su desfachatez y su locura. Pero también estaban sus miedos -que eran suyos- la sensibilidad a flor de piel y esas ganas locas de volver a ver un amanecer compartido.
Ella le había pedido mantener la magia, más allá de cómo fuera sucediendo la historia y como todo lo que conlleva una cuota de lo desconocido, pidió tiempo y un poco de paciencia.
Tenía el crédito abierto, con toda la confianza que eso significaba.
Cada vez que podían, y últimamente eso sucedía a menudo, se describían cómo eran, sus gustos, preferencias, odios y rencores.
El escaneo mutuo no era algo aislado. Formaba parte de un horizonte que se avizoraba de un mismo color, con risas y sueños en partes iguales.
Con un halo de misterio se desnudaron en palabras y elaboraron un camino con nombre propio, pese a los obstáculos, que eran muchos, antes que el barco partiera de tierra firme.
Él se quedó dormido con una sonrisa y ella se despertó con una frase que la marcó por siempre: "...le pidió a los reyes un hombre, que nunca la deje sola".

lunes, enero 21, 2008

Si me creo lo que me pasa, seguro que no me creerías.

Si te dijera lo que tengo para decirte, capaz no lo oirías.

Si un no, es un sí o un quizás, con eso alcanza para empezar, más luego no me quedaré en expectativas, quisiera un poco más, tanto como ofrezcas.

Es cierto, las cosas pasan y a nosotros nos pasó.

De alguna u otra manera él o los caminos se cruzaron en un punto de la vida, lo tomamos y andamos más allá de todo, cerca de ambos, queriéndo recorrerlos juntos.

Pocas cosas tengo para decirte ahora que siento tu mano entrelazada a la mía, que el atardecer me acompaña a tu encuentro, que tu boca busca los labios, mis ojost tu mirada y mi piel tu piel.

Nada casi nada. Tiempo sólo tiempo. Un día o una noche, ¿quién lo puede saber?, cuando nos digamos, nos confesemos que nos amamos, que la vida no es lo mismo sin el uno, ni el otro.

El miedo paraliza y el horizonte se nubla, pero si se está acompañado, poco importa eso.

¿Querés sentir cosas olvidadas? ¿Te gustaría un desayuno preparado en tu honor? ¿Apostarías todo a un número con pocas chances de ser el elegido?

De aquella vez que volví a verte muchas cosas cambiaron. ¿Pero sabés qué?. Las cosas no tienen colores difusos cuando uno se siente acompañadoo. Pensalo, yo lo pienso mientras recuerdo tu figura dormir.

sábado, enero 12, 2008

Búsqueda


Sus ojos, mejor dicho su mirada, fueron su carta de presentación y él no supo bien porque, pero observó algo misterioso y a la vez atractivo, que traspasaba una línea imaginaria y unía dos puntos en el infinito.
Su hablar desfachatado y locuaz lo transportaba en una perpleja sonrisa y él se animó a ingresar en su mundo, donde las cosas tampoco sencillas y el dolor estaba latente, más allá de su virtuoso optimismo.
Con el tiempo el contacto se fue raleando, por cuestiones primitivas de cada uno, aunque en algún punto la línea seguía trayendo imágenes de ambos, por rutas diferentes o tal vez era la forma para encontrar la misma senda. en donde puedan confluir sus emociones, sensaciones y apuestas, pese a que ella no era partidaria de esa palabra.
Las noches se fueron acercando y los desencuentros postreros hicieron que algo se fuera gestando, casualidad o no, él fue a su ciudad, casualidad o no, ella no estaba y lo lamentó, pero también entendió que los momentos llegan cuando deben llegar.
Conversaciones que pasaron por miles de temas, en especial por sus proyectos y deseos, que en varios puntos eran coincidentes.
"Quisiera tenerte en mi cama esta noche", le confesó ella y él eligió su mirada en una respuesta que ella ya prreveía.
En cierta medida sus corazones parecían confluir, pero también entendían que las cuestiones de ese órgano vital, a veces, son más rápidas que la razón y sus posibilidades.
¿Se puede pensar en el otro de esta forma?. ¿Trazar paralelismos con tiempos pasados no sirven?
Nadie los obligó a nada y ellos se obligaban a prestarse el tiempo, para conocerse, de a uno, de a dos, de a poco y vertiginósamente.
"¿Estás?"...Pensándote. La pregunta y la respuesta puede ponerse en boca de cualquiera.
El sintió cosquilleos que ella compartía a igual nivel.
Ella pidió unos besos en la espalda y sentirse protegida y acompañada luego de varios malos golpes de la vida.
Incluso en ese instante, escuchó la voz de su padre desde el recuerdo, diciéndole: "Todo llega, no busques nada".
Se entregó a Dios y sus designios, yendo con algunos recaudos y confiando en el "trabajo hormiga" que la había atrapado.
El quiso volver a sentirse feliz y lo estaba logrando, con poco o con mucho, pero confiando en el destino, esta vez....si.